En los últimos años, la inteligencia artificial (IA) ha dejado de ser un concepto reservado para la ciencia ficción para convertirse en una realidad omnipresente. Desde los asistentes virtuales en nuestros teléfonos hasta las herramientas que usamos en el trabajo, la IA se ha infiltrado en prácticamente todos los aspectos de nuestra vida.

Pero, ¿por qué esta tecnología ha ganado tanta popularidad recientemente? La respuesta a esta pregunta involucra una combinación de avances tecnológicos, cambios en las necesidades de la sociedad y una estrategia de marketing agresiva por parte de las empresas.

Avances Tecnológicos

Uno de los factores principales detrás del auge de la IA es el avance vertiginoso de la tecnología. La IA, en sus diversas formas, ha evolucionado rápidamente gracias a mejoras en el poder de procesamiento, la disponibilidad de grandes volúmenes de datos y los avances en algoritmos de aprendizaje automático. Según un informe de McKinsey, la adopción de IA generativa ha aumentado significativamente en 2024, con empresas que ya comienzan a ver beneficios tangibles en su implementación​ (McKinsey & Company).

La evolución de los modelos de IA multimodales, que integran texto, imagen, audio y video, ha ampliado las capacidades de la IA y la ha hecho más accesible para una variedad de aplicaciones, desde la creación de contenido hasta la automatización de tareas complejas​ (Forbes España). Además, la aparición de modelos lingüísticos más pequeños y especializados ha permitido que la IA sea utilizada en dispositivos con menos poder de cómputo, lo que abre la puerta a una adopción más amplia​ (Forbes España).

Necesidades de la Sociedad

Otro factor clave es el cambio en las necesidades de la sociedad moderna. La pandemia de COVID-19 aceleró la digitalización en muchos sectores, lo que incrementó la demanda de soluciones tecnológicas que pudieran mejorar la eficiencia y la productividad.

La IA ha sido vista como una herramienta esencial para cumplir con estas nuevas demandas, desde la automatización de procesos en las empresas hasta la creación de experiencias de usuario más personalizadas en plataformas digitales.

La creciente necesidad de abordar problemas complejos a gran escala, como la sostenibilidad y la salud pública, también ha impulsado el interés en la IA. Por ejemplo, en el campo de la salud, la IA ha demostrado ser una herramienta valiosa para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades, lo que ha generado un interés considerable en su desarrollo​.

El Efecto «Buzz» y el Marketing

No se puede subestimar el papel del marketing y el efecto «buzz» en la popularidad de la IA. Las empresas están ansiosas por mostrar que están a la vanguardia de la innovación, y muchas han adoptado la IA como una forma de destacar en un mercado competitivo.

Sin embargo, esto también ha llevado a una saturación de productos etiquetados como «inteligencia artificial», muchos de los cuales no aplican la IA de manera significativa. Esta tendencia ha generado cierta crítica, ya que se ha convertido en una moda que a veces carece de sustancia​ (BI España).

Además, la financiación masiva de startups centradas en la IA ha contribuido a su popularización. La inversión en estas empresas ha aumentado un 66% entre 2021 y 2023, lo que no solo refleja el interés de los inversores, sino que también alimenta el desarrollo y lanzamiento de nuevos productos basados en IA​.

Desde mi perspectiva, la IA está en el centro de atención no solo por sus capacidades técnicas, sino también por la narrativa que se ha construido en torno a ella. Vivimos en una época en la que la tecnología avanza a pasos agigantados, y la IA se presenta como la próxima gran revolución, comparable a la invención de la electricidad o internet. Sin embargo, es crucial que esta tecnología se utilice de manera responsable y que no se deje llevar por el «hype» sin considerar las implicaciones éticas y sociales.

El entusiasmo por la IA es comprensible, dado su potencial para transformar industrias y mejorar la calidad de vida. Sin embargo, también es necesario tener una visión crítica y no perder de vista que la tecnología, por sí sola, no es una solución mágica a todos los problemas. Es fundamental que se continúe invirtiendo en la formación de profesionales capacitados y en la creación de marcos regulatorios que aseguren un desarrollo ético y responsable de la IA​.

La inteligencia artificial está de moda por una combinación de avances tecnológicos, cambios en las necesidades de la sociedad y una estrategia de marketing efectiva. Sin embargo, a medida que esta tecnología sigue evolucionando, es importante mantener un enfoque equilibrado que valore tanto las oportunidades como los riesgos. Solo así podremos aprovechar al máximo el potencial de la IA sin caer en excesos o expectativas irreales.